martes, 4 de marzo de 2008

Celosssssssssss

Bueno, tenía en la cabeza que lo primero que me atreviera a escribir sería como lo dice la entrada anterior, sobre mi familia, pero debido a un párrafo mal redactado y un poco peor explicado tuve algunos problemillas, lo cual me llevo a buscar sobre el tema que escribo a continuación:

LOS CELOS

Según un artículo de Internet:

Podríamos definirlos como un estado emotivo ansioso que padece una persona y que se caracteriza por el miedo ante la posibilidad de perder lo que se posee-tiene, o se considera que se tiene-posee, o se debiera tener-poseer (amor, poder, imagen profesional o social...).
En el ámbito sentimental, el rasgo más acusado de los celos es la desconfianza y sospecha permanentes en el otro que tiñen, y perjudican gravemente, la relación con la persona amada. La mayoría entendemos por celos ese confuso, paralizador y obsesivo sentimiento causado por el temor de que la persona depositaria de nuestro amor prefiera a otra en lugar de a nosotros.
Cuando se muestra en su forma aguda, el origen de los celos hay que buscarlo en situaciones neuróticas o, en general, psicopáticas. Algunos autores creen que el sentimiento de los celos es universal e innato. Linton, por ejemplo, ve una prueba de esta tesis en el hecho de que en las Islas Marquesas, donde la libertad sexual es prácticamente total, los indígenas manifiestan sus celos sólo cuando están ebrios; es decir cuando su control voluntario, su raciocinio, ha disminuido. Por el contrario, otros psicólogos (como O.Klineberg) señalan que este sentimiento es de origen cultural, y que los celos no dependen del deseo o necesidad de goce exclusivo de los favores del otro, sino del "estatuto" social. En las sociedades monogámicas, como la nuestra, y siempre según este autor, el adulterio sólo provoca reacciones celosas en la medida en que origina inseguridad (material o afectiva) o afecta al prestigio y al honor. Son dos teorías relativamente antagónicas, pero como ocurre con frecuencia, perfectamente complementarias.
Podemos pensar por tanto, que cuando nos mostramos celosos experimentamos sensaciones inherentes a nuestra condición de seres humanos y, a la vez, manifestamos un comportamiento adquirido y heredado de nuestra cultura y modus vivendi.



Bien pues explicado de esa manera, a quien debo culpar si en algún momento de mi vida siento celos, o alguien a mí alrededor los siente ¿¿¿¿¿ a mis antepasados???? Debo pedir una regresión a una época que no me toco vivir (¿o quizás si verdad?) y pedir que no sean monogámicos??? O tal vez irme a vivir a la islas marquesas al fin que como yo no bebo alcohol entonces jamás sentiría celos no?????



Ashhh que difícil, y complicado puede resultar encontrarse con un sentimiento así, o con alguna discusión por esto. Y bien mientras trato de lidiar con eso espero que alguien escriba y me recomiende un terapeuta para eso de mi regresión. Jejejeje ñ_ñ

Sls…



D.